Vox sitúa como líder del sindicato Solidaridad a un concejal con pasado neonazi
Tiene pendiente un juicio por participar en una protesta ante un centro de menores extranjeros no acompañados

Jordi de la Fuente tiene uno de los perfiles más polémicos dentro de la estructura organizativa de Vox y a quien proponen para dirigir el sindicato de trabajadores Solidaridad. A sus 42 años, es actualmente concejal de Vox en Sant Adrià de Besòs, un municipio de la provincia de Barcelona, y asesor cercano de Ignacio Garriga, vicepresidente de Vox y diputado en el Parlament de Catalunya. Será él quien ocupe la secretaría general de Solidaridad, ya que ha sido el único que ha reunido los avales para ello al no presentarse Alonso para la reelección.
En la actualidad, De la Fuente tiene pendiente un juicio por supuestamente asaltar un centro de menores extranjeros no acompañados (menas) en julio de 2019, junto a otras personas. Fue durante una protesta a las puertas del centro de menas de El Masnou. De la Fuente participó con un megáfono arengando supuestamente a los congregados al grito de «vamos a por ellos», «moros de mierda» o «vamos a quemar el albergue». Algunos participantes de esa protesta también fueron imputados por lanzar piedras contra el centro. El concejal niega su participación en estos hechos, aunque admite que participó en la protesta. Los hechos aún no se han juzgado por una discrepancia jurídica sobre quién debe juzgar los delitos de odio.
También, De la Fuente mostró en su día su respaldo a la política de Vladimir Putin, y de uno de sus principales ideólogos Aleksandr Duguin.
El concejal de Sant Adrià de Besòs es licenciado en Políticas y de la Administración por la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona (UPF, 2004-2009) y entró en Vox en 2018. Ha sido durante todo este tiempo la mano derecha de Ignacio Garriga y fuentes del partido destacan que en Vox lo que se exige es estar comprometido y “vinculación absoluta” con los principios de la formación política y De la Fuente lo ha hecho por lo que fuentes del partido aseguran que “no vamos a penalizar su pasado”, porque subrayan que ha demostrado “su valía”. De hecho, ha sido coordinador de la última campaña de Cataluña a quien atribuyen desde el partido que la candidatura de Garriga lograra frenar las aspiraciones del PP de un mayor ascenso e incluso evitar que Alianza les mermara en escaños. “Pesa más su capacidad de organización”, insisten las mismas fuentes.