¿DEMASIADO TARDE PARA EUROPA?
Putin no ha cambiado un ápice en su proyecto expansionista con respecto a sus vecinos, especialmente con Ucrania, y el presidente norteamericano, Donald Trump, le está prestando grandes servicios a Rusia al servirle en bandeja de plata a este país y no suministrarle armas en esta ardua coyuntura.
por Ricardo Angoso
Pero también Europa está en peligro, la política de apaciguamiento de entregar territorios a cambio de una paz injusta nunca suele dar resultados, tal como la historia nos demostrado muchas veces. Nada detendrá a Rusia. El expansionismo militar ruso es la brújula política de Putin con respecto a sus vecinos. El ataque ruso a Ucrania, el 22 de febrero de 2022, tenia unos objetivos bien claros: desmembrar y neutralizar a Ucrania, privarle de una buena parte de sus territorios e instalar una administración proclive a sus intereses en Kiev.
Aunque todavía no ha conseguido todos sus objetivos en esta guerra, Putin por lo pronto ha conquistado el 20% del territorio ucraniano y se ha anexionado los departamentos de Donetsk, Lugansk, Jersón y Zaporiyia casi en su totalidad. Putin es un peligro y ahora, con Trump en la Casa Blanca, se siente más fuerte que nunca. Sus delirios imperiales, nunca ocultados, se ven ahora formalmente cumplidos.
El reciente voto de Estados Unidos en la Asamblea General de las Naciones Unidas en contra de sus aliados más cercanos, poniéndose del lado de Rusia, Bielorrusia y Corea del Norte para votar en contra de una resolución sobre el conflicto en Ucrania, ha puesto de manifiesto el acercamiento de la nueva administración norteamericana hacia las posiciones de Putin, un juego realmente muy peligroso y de impredecibles resultados.
TRATO HUMILLANTE AL PRESIDENTE UCRANIANO
Por no hablar del trato humillante recibido por el presidente ucraniano, Volodimir Zelenski, al que Trump pretende obligarle a capitular frente a Rusia, aceptando sus humillantes condiciones, y también para que entregue sus materias primas casi sin condiciones a los Estados Unidos. A este giro copernicano en la política exterior norteamericana, y añadiendo más leña al fuego, se le vienen a unir las declaraciones del influyente multimillonario y consejero de Trump, Elon Musk, en las que apuesta porque Estados Unidos abandone la OTAN y la ONU, dejando el mundo en manos de Rusia.
Estamos en una nueva era incierta y terrible, en la que Trump -un supino ignorante de la historia- apuesta por defender al invasor en lugar de ayudar al atacado, apoyar al victimario que desangra a Ucrania en vez de ponerse del lado de la víctima. Se trata de una reedición de los tristemente conocidos acuerdos de Munich, por los cuales Francia y el Reino Unido, en 1938, entregaron a Hitler Checoslovaquia para saciar sus ansias territoriales. Lo que ocurrió después es de sobra conocido: Hitler atacó Polonia, el 1 de septiembre de 1939, y comenzaba la Segunda Guerra Mundial. El resultado: sesenta millones de muertos y una Europa destruida material y espiritualmente tras conocer el Holocausto.
Este anuncio de la posible salida de la OTAN por parte de Estados Unidos y abandonar a Europa a su suerte, dejando desprotegido al continente, abriría las puertas a previsibles ataques rusos a otros países europeos, como los bálticos -Lituania, Letonia y Estonia-, Polonia y Moldavia, siempre en el punto de mira de Moscú. Vivimos tiempos turbulentos e inciertos, tal como ha advertido el presidente francés, Enmanuel Macron, hace unos días en un discurso televisado.
Termino estas reflexiones con unas palabras del general Douglas MacArthur cuando aseguraba que “la Historia de los fracasos de la guerra se puede resumir en dos palabras: demasiado tarde.Demasiado tarde para comprender el letal peligro. Demasiado tarde para colocar todos los recursos disponibles para enfrentar ese peligro. Demasiado tarde para ponernos al lado de nuestros amigos.” ¿Será demasiado tarde para que Europa pueda defenderse por sí misma ante el expansionismo ruso sin la ayuda de los Estados Unidos?
@AngosoRicardo