Anda Pedro Carmona muy preocupado en estos días por la grave crisis que atraviesa su país. Lógico, el horno no está para bollos. Carmona vivió en primera persona la crisis de abril de 2002, cuando tras una serie de protestas contra la orientación autocrática del régimen chavista, se produjo una violenta represión oficialista contra una masiva marcha en Caracas, con el resultado de casi una veintena de muertos y el desacato militar a órdenes represivas de Chávez, que condujeron al anuncio de su renuncia por parte del alto mando militar. La crisis y el desacato llevó a la conformación de un gobierno de transición que encabezó el mismo Pedro Carmona durante apenas unos días, cuyo propósito era conducir a elecciones generales en breve plazo. La crisis tiene un parecido con la de ahora, pero no es igual, tal como nos lo explica Carmona